Will B. llama hogar a Endicott, Nueva York, y ha sido un donante habitual en el centro CSL Plasma en Endwell, Nueva York, durante más de dos años, habiendo donado más de 200 veces.
Comenzó a donar en parte para obtener un poco de dinero extra, pero escuchó de primera mano a un paciente, y eso marcó la diferencia. También aprecia la facilidad del proceso para donar plasma y el ambiente amigable en su centro de donación.
Will también les ha contado a otros sobre la oportunidad de salvar una vida mediante la donación de plasma. Cuando las personas preguntan sobre la experiencia, él comparte que descubrió que la dieta, el descanso y la hidratación ayudan a respaldar un proceso de donación de plasma sin problemas.
Will también ha conocido a personas en su comunidad que dependen de medicamentos elaborados con plasma. Él comparte: “Una persona en particular me agradeció cuando mencioné que dono plasma. Me hizo el día."
Will dice que sigue aprendiendo más sobre lo que puede hacer el plasma para ayudar a salvar la vida de los demás.
Will agrega: “Para mí, personalmente, donar plasma me ayuda financieramente, pero también siento que estoy ayudando a las personas al mismo tiempo. Donar plasma ha cambiado mi vida de una manera muy positiva.”
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